lunes, 14 de febrero de 2011

Cosas de enanos

El enano que vive en el corazón y el enano que vive en la cabeza no se hablan.
Tienen horarios diferentes, cuando el enano de la cabeza duerme, el del corazón canta y baila, y cuando el del corazón hace fiesta, el de la cabeza siempre tiene algo mejor que hacer.
Si uno se deja barba, el otro se depila hasta las cejas.
Si uno quiere estar tranquilo, el otro hace ruido.
El del corazón esta tan loco, que se golpea con cualquier cosa y a veces hay que entablillarlo.
Intenta no quejarse pero a veces se le escapa algún gemido.
El enano de la cabeza asoma por un agujerito y dice:
- ¿ves, ves?
El enano del corazón no responde, y pasa mucho rato en silencio. Mucho, mucho rato, casi una eternidad.
El enano de la cabeza asoma otra vez y pregunta:
- ¿Estás bien?
Pasa otra eternidad en silencio y cuando el enano de la cabeza ya no espera respuesta, asoma el del corazón y pregunta susurrando:
-¿Y tú, estás bien?

5 comentarios:

  1. Ay, madre, la eterna discordia...
    Ojalá mis enanos estuvieran alguna vez de acuerdo en algo.

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  2. Malditos enanos, ¿no podrían ponerse de acuerdo por una vez? La razón y el corazón, o tal vez, sea la vida invisible.

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  3. son hermanos y como tales se pelean, pero no pueden vivir el uno sin el otro. Se necesitan

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  4. hermanos como Caín y Abel. Igualitos.

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  5. Siempre me ha escamado que dentro de la palabra corazón, se esconda camuflada la jodida razón: siempre metiéndose donde no le llaman, cortando alas.

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