LA VIDA COMO UNA TAPA

LA VIDA COMO UNA TAPA
El viernes es el día más celebrado por los trabajadores de la fábrica de tabacos. Y es un hecho bien cierto que no dejan pasar ese día sin celebrar la paga, con la paga, el sobrecillo … Para gastar y disfrutar de la compañía de los repetidos y sufridos mozos de almacén, manipuladores de habanos y demás fauna.
Todo ocurre con inacabable liturgia y , como si de una costumbre no escrita se tratara, llegando las siete de la tarde, podemos ver el abultado numero de operarios apiñados en la misma tasca de la esquina, vaso en mano, botellín de cerveza o copita de yerbas para empezar el trasiego .
Es de uso común esperar a los más tardíos para acercar mesas y banquetas con objeto de entonar el himno más popular por esos lares : Asturias, patria querida ¡. Y siempre el borde de Isaac, el tasquero, regañando y poniendo mala cara por la escandalera.
A las 11, todo dios se ha quitado de en medio. Es la norma, y así transcurre viernes tras viernes la misma escena.
Algunos entreactos más tarde , aparece Miguelón, el fontanero , caja de herramientas en mano, como si a esas horas se pudiera mantener en pié para arreglar que sé yo qué tubo de cobre, ni niño muerto. Pero así lo mandan los cánones, e Isaac no ha cerrado aún el bareto, amén de sentirse generoso para aguantar una hora más al fontanero más pendenciero de los alredores. Sarna con gusto…. . Miguelón tiene toda la gracia del mundo, contando chistes, claro, si no fuera porque su vida es un puro chiste.
Aún se rie la gente de sí misma. Pero cada vez menos. Acervo en extinción.
La noche acaba de empezar para Emilio y Jose Luís, que no escatiman en halagos el uno para el otro. Maqueados y limpitos se dan un garbeo de bar en bar.Primero, tapear con cerveza, que es más barato; y más tarde , sobre las 2 de la madrugada, heladito y copazo en sitios poco recomendables ( sobretodo si al otro día te tienes que confesar ).
Pero son gente muy sana, en pensamientos obra y omisión. Además, jamás se fueron de putas, y eso lo dice todo de ellos.
Para mí, un hombre que necesita pagar por follar es dos cosas : un amargado sin autoestima y un gilipollas integral que además se lo cree ( lo de ser un gilipollas nato ).
Osea , que omiten esa parte,porque no la necesitan. Y esto se mueve así , por necesidades.
La de pasar una noche juntos, sin necesidad de ser “cancos “, sino más bien disfrutar de la compañía de su mejor amigo, mutuamente.
Una historia atemporal, como las de toda la vida. En los 80, 90 o donde queramos colocarla.
Acaso, querido lector, hay que hartarse de farlopa, presumir de paquete gimnástico genital, maltratar a mujeres propias y ajenas, desmadrarse a lo americano con pérdida completa de sentido y acabar en comisaría, para pasar un buen fin de semana. Este es el estilo de vida del que presumo, con mis amigos, claro.
Canco: léase, maricón, chapero, baboso , chupapollas, putero barato, cazador mentiroso, gente soez, donde las haya .