lunes, 12 de septiembre de 2011

Calentamiento global


Hace tiempo que se aísla en la torre más alta de Invernalia. Desde su atalaya contempla el extenso territorio y admira sin que nada se interponga el blanco impoluto y brillante del hielo. Con desazón recuerda las palabras del profeta Baldin: “Llegará el día en que la tierra se calentará en gran medida, así como el mar y el aire que respiramos, los hielos se derretirán y los mares aumentarán su tamaño y sepultarán ciudades bajo sus aguas, y esto provocará el fin de muchas especies, y será difícil la supervivencia de la humanidad”. Lord Eddard Stark piensa angustiado en su descendencia, en las gentes que conforman su señorío y teme que el Norte se convierta al fin en el reino olvidado.

2 comentarios:

  1. Pues sí, refugiarse en el norte huyendo de una profecía. Estamos hechos de miedo. Miedo al calor, al frio, a los demás, a nosotros mismos...

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  2. Yo, sobre todo, le tengo miedo al calor y a los turistas. Un triste augurio de lo que nos sucederá en el futuro.

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